OMS: ¿Cómo lavarse las manos? Con agua y jabón
Lávese con agua y jabón cuando las manos estén visiblemente sucias o contaminadas con material proteínico, o visiblemente sucias con sangre u otros fluidos corporales, o si se sospecha o se demuestra fuertemente la exposición a posibles organismos formadores de esporas, o después de ir al baño.
El uso de guantes no sustituye la necesidad de higiene de las manos, ya que los guantes no proporcionan una protección completa contra la contaminación de las manos. Los microorganismos pueden acceder a las manos del personal sanitario a través de pequeños defectos en los guantes, o por la contaminación de las manos al quitarse los guantes.
La piel intacta es la primera línea de defensa contra las infecciones. La piel dañada no sólo puede provocar una infección en el huésped, sino que también puede albergar un mayor número de microorganismos que la piel intacta y aumentar el riesgo de transmisión a otras personas.
La mayoría de los problemas cutáneos entre los trabajadores sanitarios que están relacionados con la higiene de las manos se deben a la dermatitis de contacto irritante. La dermatitis de contacto irritante se debe principalmente al uso frecuente y repetido de productos para la higiene de las manos; especialmente jabones, otros detergentes y el uso de toallas de papel, que provocan la sequedad de la piel. El uso inicial de productos de limpieza de manos a base de alcohol entre estos trabajadores sanitarios suele provocar una sensación de escozor. Sin embargo, estudios recientes han sugerido que el uso continuado de productos de limpieza de manos con alcohol que contienen emolientes conduce a la mejora de la dermatitis de contacto irritante en aproximadamente el 70% de los trabajadores sanitarios afectados. Además, el uso de una loción que contenga aceite o una crema de barrera tres veces por turno puede proteger sustancialmente las manos de los trabajadores sanitarios vulnerables contra la sequedad y la irritación química, evitando la ruptura de la piel.
Cómo lavarse las manos | NHS
Lavarse las manos: lo que hay que hacer y lo que no hay que hacerEl lavado de manos es una forma sencilla de prevenir infecciones. Sepa cuándo debe lavarse las manos, cómo utilizar correctamente el desinfectante de manos y cómo hacer que sus hijos adquieran el hábito.Por el personal de Mayo Clinic
Al tocar personas, superficies y objetos a lo largo del día, se acumulan gérmenes en las manos. Puedes infectarte con estos gérmenes al tocarte los ojos, la nariz o la boca, o contagiar a otros. Aunque es imposible mantener las manos libres de gérmenes, lavarse las manos con agua y jabón frecuentemente puede ayudar a limitar la transferencia de bacterias, virus y otros microbios.
Los desinfectantes de manos a base de alcohol, que no requieren agua, son una alternativa aceptable cuando no se dispone de agua y jabón. Si utiliza un desinfectante de manos, asegúrese de que el producto contiene al menos un 60% de alcohol. Siga estos pasos:
Ayude a los niños a mantenerse sanos animándoles a lavarse las manos con frecuencia. Lávese las manos con su hijo para mostrarle cómo se hace. Para evitar las prisas, sugiérale que se lave las manos durante el tiempo que tarde en cantar la canción del “Cumpleaños feliz” dos veces. Si tu hijo no puede alcanzar el lavabo por sí mismo, ten a mano un taburete.
Técnica de lavado de manos con agua y jabón Habilidad enfermera
A medida que avanza en su vida cotidiana, los gérmenes se acumulan en sus manos. Cuando te tocas los ojos, la nariz o la boca, los gérmenes que llevan allí pueden causar infecciones. Lavarse las manos con frecuencia es una de las mejores maneras de evitar enfermar y contagiar.
Los bebés y los niños también necesitan lavarse las manos. Si tu hijo es demasiado pequeño para estar frente a un lavamanos, puedes lavarle las manos con toallitas desechables o con una franela húmeda y jabonosa, pero asegúrate siempre de que se enjuaga todo el jabón y se seca bien las manos.
Lavarse las manos es también una de las formas más importantes de prevenir la propagación de infecciones entre las personas hospitalizadas. El sistema inmunitario de las personas suele estar debilitado tras una enfermedad o intervención quirúrgica, por lo que las infecciones son fáciles de contraer y difíciles de tratar. Pueden llegar a ser mortales.
Lavarse las manos es una de las cosas más sencillas y eficaces que se pueden hacer para proteger su salud y la de los demás. Los agricultores están en contacto con muchas fuentes potenciales de enfermedades y dolencias. Leer más…
Miles de personas en todo el mundo mueren cada día por infecciones contraídas durante la atención sanitaria, y una higiene de manos adecuada y suficiente es una técnica de prevención crucial que todos podemos utilizar para reducir la propagación de infecciones y enfermedades perjudiciales.
Guía completa para el lavado de manos
Lavarse las manos es fácil, y es una de las formas más eficaces de prevenir la propagación de gérmenes. Unas manos limpias pueden ayudar a evitar que los gérmenes se propaguen de una persona a otra y en nuestras comunidades, incluyendo su hogar, lugar de trabajo, escuelas y guarderías.
Lavarse las manos con agua y jabón es la mejor manera de eliminar los gérmenes en la mayoría de las situaciones. Si no dispone de agua y jabón, puede utilizar un desinfectante de manos a base de alcohol que contenga al menos un 60% de alcohol. Puedes saber si el desinfectante contiene al menos un 60% de alcohol mirando la etiqueta del producto.