Enjuague bucal antes o después del cepillado
El cepillado de los dientes del niño debe comenzar cuando empiezan a salir los primeros dientes, o según las indicaciones del pediatra o del dentista. Los niños necesitarán ayuda para cepillarse los dientes hasta que tengan entre 7 y 8 años. Incluso antes de que su hijo tenga dientes, es importante realizarle un cuidado bucal. Con una toallita húmeda o un trozo de gasa, frótala suavemente sobre las encías del bebé para ayudarle a limpiar la boca. Puede utilizar un cepillo de dientes suave, humedecido con agua, cuando el niño haya desarrollado algunos dientes. Los expertos aconsejan consultar al dentista sobre el momento adecuado para que el niño empiece a usar pasta de dientes. Utilice sólo una pequeña cantidad de pasta dentífrica, porque los niños pequeños suelen tragársela, en lugar de escupirla.
Como cada boca es diferente, hay más de una técnica de cepillado que ha demostrado su eficacia. Decidir qué técnica es la más adecuada para tu hijo depende en gran medida de la posición de sus dientes y del estado de sus encías. Consulte al odontopediatra de su hijo para determinar qué técnica de cepillado es la más adecuada para su boca.
¿Cuál es el protocolo para el cepillado de dientes?
La recomendación consensuada es cepillarse los dientes durante dos minutos dos veces al día con un cepillo de cerdas suaves. Sustituya los cepillos cada tres o cuatro meses, o más a menudo si las cerdas están visiblemente mates o deshilachadas.
¿Hay que cepillarse los dientes antes o después del desayuno, o ambas cosas?
En conclusión, antes del desayuno es el mejor momento para cepillarse los dientes por la mañana. Pero si tomas las precauciones adecuadas, puedes hacer que el cepillado después del desayuno también funcione. De este modo, mantendrás tu esmalte a salvo de cualquier daño.
¿Cuál es la regla de oro de la higiene bucal?
Cepíllate los dientes dos veces al día con pasta dentífrica fluorada. Limpie diariamente entre los dientes con hilo dental o cepillos interdentales. Siga una dieta sana y equilibrada y limite el consumo de azúcares añadidos. Visite regularmente al dentista para revisiones y cuidados preventivos.
Cuándo cepillarse los dientes
Las recomendaciones profesionales para la higiene bucal individual incluyen, en la mayoría de los casos, cepillarse los dientes al menos dos veces al día durante 2-3 minutos con fuerza suave utilizando la técnica de Bass o modificaciones de la misma. Este estudio evaluó si el cepillado dental habitual cumple realmente estas normas. A adultos no instruidos (n = 103; edad media 31 +/- 6 años; 61 mujeres, 42 hombres) con cepillado dental manual habitual se les pasó un cuestionario autoadministrado sobre la frecuencia de cepillado y un sistema informático registró su técnica de cepillado, duración y fuerza. La mayoría (79,6%) de los participantes se cepillaba los dientes dos veces al día. La duración media del cepillado fue de 96,6 +/- 36,0 s, la fuerza media del cepillado fue de 2,3 +/- 0,7 N (máx. 4,1 N), y no se encontraron diferencias significativas por cuadrantes. La mayoría de los sujetos (73,8%) se cepillaron con movimientos circulares, el 8,7% con movimientos horizontales/de cepillado, el 13,6% con movimientos horizontales/circulares y el 3,9% con movimientos verticales/de barrido. No se observó ninguna técnica de Bass modificada. Cuando los hábitos de cepillado adecuados se definieron como cepillarse al menos dos veces al día durante 120 s con una fuerza de cepillado inferior a 3 N y con movimientos circulares o verticales de barrido, sólo el 25,2% de los participantes cumplían todos los criterios, lo que subraya la necesidad permanente de educación en higiene bucodental.
Técnica de cepillado Stillman
¿Sabías que existen distintas técnicas para cepillarse los dientes? Investigadores del University College de Londres encuestaron a organizaciones odontológicas de todo el mundo, examinaron libros de texto de odontología e incluso preguntaron a los fabricantes de cepillos de dientes cómo recomiendan limpiarse los dientes. Resulta que no todo el mundo está de acuerdo.
El método más recomendado es la técnica de Bass modificada, que consiste en sostener el cepillo en ángulo de modo que las cerdas apunten a la línea de las encías y dar pasadas cortas hacia delante y hacia atrás, seguidas de un barrido del cepillo desde debajo de la encía hacia el borde del diente. Otras técnicas son los movimientos ascendentes y descendentes sobre los dientes y los movimientos circulares. Tienen nombres como Fones y Scrub.
La Asociación Dental Americana (ADA), la mayor organización profesional de dentistas de Estados Unidos, recomienda la técnica Bass. Coloca el cepillo en un ángulo de 45 grados respecto a las encías y muévelo suavemente hacia delante y hacia atrás con movimientos cortos para cada diente. Otro consejo: después de limpiarte los dientes, la ADA recomienda cepillarse la lengua para eliminar bacterias y mantener un aliento fresco.
¿Cuántas veces debo cepillarme los dientes?
En primer lugar, es importante utilizar un cepillo de cerdas suaves. Un cepillo duro no cepilla mejor, y es probable que cause daños tanto en las encías como en los dientes, al provocar la recesión de las encías y la abrasión de las caries, lo que dará lugar a unos dientes muy sensibles. Además, elegir un cabezal compacto permite al cepillo llegar a zonas de la boca de difícil acceso.
Caries por abrasión y recesión de las encías causadas por un cepillado excesivamente entusiasta, ¡especialmente con un cepillo de dientes medio o duro! Estas zonas serán muy sensibles y necesitarán empastes para tratar la sensibilidad.
En segundo lugar, es importante que las cerdas entren en contacto con las encías en un ángulo de 45 grados para eliminar la mayor cantidad de placa posible. Cepillarse las encías con excesiva fuerza no es aconsejable, ya que dañará las encías, y evitar por completo las encías mientras se cepillan los dientes sólo permitirá que la placa permanezca y madure y, finalmente, se endurezca a lo largo de los márgenes de las encías. Lo ideal es masajear suavemente las encías con un cepillo de dientes blando, ya que así se consigue el equilibrio necesario para limpiar los dientes sin dañarlos innecesariamente.